Buenos días de Lunes!
Hoy venimos para hablar del césped artificial, de los pros y de las contras (Aunque sean pocas)
Si tenéis una casa y estáis pensando en arreglar el césped, seguro que después de este post os decidís!
El césped artificial tiene muchísimas ventajas. Sin embargo, para que pueda competir con la naturalidad y la frescura del césped natural debe ser de buena calidad. Es cierto que el césped artificial es más económico pero requiere un gasto inicial mayor. Siempre resultará más barato en cuanto al mantenimiento a lo largo del tiempo ya que el césped natural requerirá muchos más cuidados y una inversión continuada para mantenerlo en buen estado.
La verdad que este tipo de césped cuenta con una gran cantidad de cualidades positivas, por ejemplo, la gran similitud que tiene con la hierba natural. Todo hay que decirlo a mayor calidad del producto, mayor parecido a un césped natural. La calidad influye también en la capacidad de drenaje del mismo, por lo que no veremos esos charcos en medio de nuestro jardín.
Como hemos dicho antes el mantenimiento que requieren este tipo de césped es prácticamente nulo, se adapta a cualquier clima y son resistentes a los rayos UVA, al cloro, al agua del mar y a las heladas, por lo que tendrá el mismo aspecto los 365 días del año.
Ahorro, no sólo ahorrarás energética y económicamente sino que, como el césped artificial no necesita abono ni cortarlo cada cierto tiempo, no requiere tratamiento, no propaga la llama, no necesita de relleno ni riego, ni produce alergias. No produce abrasión y es compatible con mascotas. Tiene una alta resistencia al desgaste y es un producto de larga duración, por lo que tendrás una tarea menos que hacer el fin de semana.
Se puede instalar en cualquier superficie y además es muy fácil de hacerlo, sobre todo sobre hormigón y baldosa. Una de las principales ventajas del césped artificial es el formato, ya que existen diferentes formatos adaptados a tus necesidades, desde rollos precortados hasta bobinas al corte.
Las únicas pegas que le encontramos, que hay que tener en cuenta que la instalación del césped artificial supone un coste inicial mucho más elevado que el césped natural. Y aunque parezca una tontería, no huele. Si te gusta lo auténtico, por muy mullido y verde que sea el césped artificial jamás podrá compararse a la sensación y al olor del césped natural.
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